15/11/09
Las cosas pierden identidad cuando él las toca, cuando él las visita, cuando él existe cerca. Mi imaginación y mi subjetividad habían hecho un pacto diabólico para volverme completamente loca. Necesitaba verlo nuevamente, pero como una droga: por el momento estaba satisfecha, no quería pedir mas, no quería tener sobredosis. Necesito, me dá. Necesito. Necesito. Vuelve y me dá. Y me calo y vuelvo a respirar y vuelvo a vivir. Me dá lo que necesito, ¿lo que necesito? Me da lo que quiere darme, sabiendo que voy a aceptar cualquier limosna que venga del rey que le hice creer que es. Y entonces desaparece, y lo necesito y no esta, y no vuelve. Necesito y la abstinencia de nuevo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario